El fracaso como fórmula de crecimiento
Por el 23.12.2009 // 11:28 en GeneralEl fracaso forma parte inherente de la vida laboral y personal. Quien diga que siempre ha conseguido sus objetivo o miente o es que es un verdadero genio sin parangón. Todo el mundo tiene derecho a equivocarse y de hecho suele hacerlo con más o menos frecuencia. El mundo del emprendimiento no es diferente en este sentido.
El fracaso no es plato de buen gusto para nadie, pero tampoco es el fin del mundo. La clave consiste en ser capaces de aprender de los errores cometidos y sacar algo positivo de cada experiencia. Aunque cada proyecto será diferente, siempre existen una serie de elementos comunes que se pueden traspasar de uno a otro. Desde aspectos puramente administrativos hasta cuestiones más relacionadas con el plan de negocio o la forma de conseguir financiación.
Se trata de fracasar de forma inteligente. Es decir, que el fracaso constituya una forma para empezar de nuevo con otro proyecto, de reinventarse como apuntó Marc Vidal en el último Café & Finanzas. Para ello relató como un pueblo tenía que desplazar físicamente cada cierto tiempo todo el pueblo para evitar que el desierto se lo tragase. El problema es que lo movían sólo unos cuantos kilómetros, de forma que después tenían que volver a hacerlo pasado un tiempo. Desde un punto de vista productivo, es una forma muy ineficiente de operar y sería más lógico mover el pueblo una sola vez a mayor distancia. La respuesta a la pregunta por parte del líder de los lugareños fue que de esta forma podían reinventarse cada poco tiempo.
Salvando las distancias, la capacidad para asumir los errores (en el caso anterior la acción del desierto) y reinvertirse es lo que permite al emprendedor seguir adelante y, sobre todo, crecer profesional y personalmente. La inmaculada trayectoria del FC Barcelona la pasada temporada es otro gran ejemplo. Como explican en GurusBlog, el éxito del conjunto blaugrana se debe en parte a Pep Guardiola y en parte a que el grupo (los jugadores) aprendieron de sus errores y del fracaso de anteriores temporadas (además, claro, el club permitió al grupo crecer como tal en lugar de disolverlo y empezar de cero).